El lugar fue visitado por Unamuno en sus andanzas por Castilla (véase [2]):
"En Moarves una bella portada de encendida encarnadura, de piedra, donde Cristo -la puerta de las ovejas - rodeado de los cuatro animales simbólicos de la Esfinge - hombre, águila, león y toro - y en medio de la docena de apóstoles. Debajo, el arco ajedrezado de la puerta. Y arriba, en la torre, la cigüeña ha fabricado su nido en copa de leña, obra también de arquitectura. Le lanza a uno ese nombre, Moarves, a soñar con unos presuntos mozárabes que, al amparo del Cristo de la puerta - y Puerta Él -se acogieron, merced a la reconquista románica y visigótica, al redil de la raza."
Historia de Moarves y su Iglesia
La referencia principal de esa sección es [1].
La Ojeda se repobló a partir del siglo X. Por su situación natural comunicaba la cuenca del Pisuerga con la Liébana. El topónimo "Moarves" está vinculado a una muy probable repoblación con gentes de orígenes mozárabes. Está documentado que en 1064 un cierto Salvador González donó sus propiedades en Moarves al Monasterio de Santa Eufemia de Cozuelos (vid. supra); otra donación semejante la hizo el freire Gonzalo Gómez, en 1270. García Guinea [1] ha propuesto una vinculación territorial y artística entre San Juan de Moarves y el Monasterio de San Andrés de Arroyo (vid. supra). En el Libro Becerro de las Behetrías (de 1351 a 1352), Moarves figura como lugar de behetría perteneciente a Tello.
Además de la obra románica, la Iglesia tiene un cabecero con bóveda evidentemente gótica. El Ábside linda con la carretera y la fachada Sur está rodeada por un murete que encierra lo que antes fue un camposanto, ahora con una superficie cubierta por cantos rodados. El acceso a través del murete se hace por unos escalones hechos, tal vez, a partir de restos de un zócalo interior con un bocel. Estas y otras evidencias in situ prueban que hubo reutilización de materiales. Citados en la referencia [1], se sabe que hubo derrumbamientos hacia los años 1939 y 1955.
La Iglesia de San Juan Bautista fue declarada Monumento Histórico el 3 de Junio de 1931.
San Juan de Moarves
Vista desde el SurOeste
Planta y Estructura
El edificio es de dimensiones acordes a la pequeña localidad que siempre fue y es Moarves. La construcción está hecha con excelentes sillares de piedra arenisca local. Los muros tienen en el interior del cabecero semicolumnas que se corresponden en el exterior con contrafuertes de sección rectangular, dos emparejados con el arco triunfal del interior, dos en las esquinas del ábside de testero plano. En el hastial Oeste hay otros tres contrafuertes de sección rectangular, que ayudan a sostener la espadaña.
La zona rectangular central del edificio actual data del Románico Final. La espadaña terminada apiñóncon vanos para las campanasy el hastial oeste, son del Gótico, con un esquema constructivo común en el Románico Palentino- vea los vídeos de [6],[7] y [8] - especialmente el del Norte de la provincia. También son Góticos el muro SurEste y el remate externo de la cabecera, así como la bóveda de este espacio, que es datable en los finales del siglo XV. La estructura de está bóveda de tracería puede examinarse en la planta inmediatamente siguiente ( la imágen procede de la referencia [1]) : tiene 17 claves y está construida con los correspondientes terceletes y combados.
Las
obras de reparación y reformas parecen haberse sucedido a lo largo del
tiempo. Entre 1989 y 1990 se restauraron las cubiertas y el pavimento de
la zona Norte, cuyo muro se drenó. El acceso al interior se hace ahora
por la magnífica Portada Románica Meridional con sus excelentes arquivolta y friso escultórico.
Vista General del Exterior
San Juan de Moarves
Vista desde el SurOeste
San Juan de Moarves
Vista desde el SurEste
Las ventanas románicas del muro sur, como puede verse en los vídeos e imágenes panorámicas sobre estas líneas, tienen ambas una estructura similar, semejante en su decoración a las arquerías del claustro de Santa María la Real, en Aguilar de Campoo:
capiteles con hojas de acanto, acantos espirales, grifos enfrentados
una chambrana lisa con bolas y vegetales enlazados
San Juan de Moarves
Vista desde el Norte
En la fachada Norte hay una puerta, situada por debajo del nivel de la calle, que estuvo mucho tiempo cegada (¡la puerta, no la calle!) por la acumulación de tierras. Tiene una elegante triple arquivolta apuntada. La parte central se apoya en un capitel sobre una fina columnita (una a cada lado), un conjunto muy similar a columnas y capiteles que hay en San Andrés de Arroyo. En esta zona es patente la humedad, uno de los principales peligros para este monumento.
Vista General del Interior
La Pila bautismal tiene forma de tronco de cono invertido. Contiene relieves, muy dañados que representan un Cristo sedente y un Apostolado, bajo arquerías. La parte superior de los relieves está dañada y esquemáticamente restaurada. Originalmente estaba en los pies de la Iglesia en una zona muy afectada por la humedad. Las intervenciones sobre la pila están descritas en [1]. García Guinea estima que esta obra está relacionada con el friso de la Portada Meridional y que debe ser obra de un escultor popular - provinciano? - de principios del siglo XIII. Presentamos aquí un modelo 3D, original de @lizlastra, que puede revisarse en la la referencia [9].
En los videos y en las imágenes panorámicas que siguen puede verse que los capiteles del arco triunfal se prepararon para ser tallados in situ, pero esa tarea no se realizó, como demuestran los cubos angulares superiores, que habrían de servir para labrar los prótomos de la parte superior de la cesta, tal como se hizo en San Andrés de Arroyo.
San Juan de Moarves
Vista desde la Pila Bautismal
Modelo 3D de la Pila Bautismal
hecho por @lizlastra, en Sketchfab
San Juan de Moarves
Vista desde el Altar
La Portada Sur: Estructura
Las referencias principales de esta sección son [1] y [2].
Una Arquivolta de cinco roscas más el arco de entrada, todos de medio punto ligeramente rebajado.
Bajo estás y sustentándolas, cinco columnas con extraordinarios capiteles.
Este conjunto y la parte adyacente del paramento del muro Sur están coloreadas con un encarnado muy característico, que se obtuvo pintando los sillares con una tintura mineral a base de óxidos de hierro.
El conjunto del friso y la arquivolta sobresale notablemente del muro Sur. El exceso de anchura del friso apoya sobre dos ménsulas labradas, que se muestran a continuación:
Al Oeste un guerrero que combate contra un monstruo, muy posiblemente un dragón.
Al Este una cabeza de negro colocada en un cepo.
Ambas piezas son de muy cuidada factura, aunque suelen pasar desapercibidas en un primer examen, por la potente impresión que produce el friso del Apostolado.
Guerrero y Dragón
Ménsula soporte, a la derecha del Friso
Cabeza de Negro en un cepo
Ménsula soporte, a la izquierda del Friso
El Apostolado y la Maiestas Domini
En en friso hay un Cristo en Majestad, sedente y acompañado por el Tetramorfos, la representación simbólica de los cuatro evangelistas canónicos. A cada lado del Cristo, seis Apóstoles, que se identifican por las filacterias o libros que portan. Quizá los más reconocibles sean Juan y Pedro, inmediatamente adyacentes al Cristo por el Oeste: el primero es joven y sin barba, con su nombre en la filacteria. El segundo es barbado, al lado de la Maiestas, sosteniendo las llaves del Reino de los Cielos (Mateo 16, 17-19) en su mano izquierda. Los Apóstoles están situados en hornacinas conformadas por pares de columnitas, a veces con fustes adornados, de capiteles vegetales sorprendentemente elaborados, que sostienen un arco trilobulado.
En [1] y [2] se describen las polémicas entre los estudiosos de principios del siglo XX sobre la relación, o no, entre este Apostolado y el de la Iglesia de Santiago en Carrión de los Condes (tras pulsar el enlace,vaya a la página 1012). Según A.L. Mayer (vea las referencias de [1] y [2]), la de Moarves es una obra provinciana, de autor español, cuya formación e influencias probablemente vengan de la Catedral de Lugo. A.K. Porter (vea las referencias de [1] y [2]) opinaba que el friso de Moarves es una copia del de Carrión. García Guinea se inclina por la opinión de Porter y fecha el friso de Moarves en 1185 (con influencias de las obras de San Andrés de Arroyo) y el de Carrión en 1170.
Algunos autores, mencionados en [1] y [2], parecen dar valor de obra menor al friso de Moarves al compararlo con el de Carrión o con la espléndida escultura románica de Francia. Nosotros aquí mostramos nuestro más recio desacuerdo: creemos que la Portada de San Juan de Moarves es una de las joyas del Románico Español. Dicho queda.
La Maiestas Domini del centro del friso - aproximadamente ocupa un cuadruplo del ancho del espacio de cada apóstol - es sin duda su parte más notable. El Tetramorfos está representado por los habituales seres, en este caso todos ellos alados. Desde arriba a la izquierda, en sentido horario:
Mateo, representado por un Ángel en pie sobre las aguas. Va vestido por un manto con pliegues muy marcados, los de los brazos trabajados con trépano. La tela tiene roturas por las que el escultor ha resaltado la musculatura del personaje. En las manos porta un libro que representa su Evangelio, con las tapas cerradas por un herraje.
Juan, representado por un Águila. Con el pico lleva una filacteria, de la que se conserva un resto pequeño, y con las garras sujeta un volumen, como símbolo de su Evangelio.
Lucas, representado por un Toro alado. Entre las pezuñas delanteras tiene un libro con tapas cerradas por un herraje, para simbolizar su Evangelio.
Marcos, representado por un León alado, algo menos convincente que las figuras anteriores: por la cabeza y los rizos más parece un perro pequinés que un fiero León. Entre las zarpas tiene un libro con tapas y herraje, en representación de su Evangelio.
El Cristo está sentado en el interior de una mandorla, construida con un par de bandas onduladas que se abren regularmente para albergar unas flores cuadripétalas. La cabeza está nimbada, con el rostro resaltado por la cabellera, la barba y el bigote. La mano derecha bendice y la izquierda muestra un libro con otra flor cuadripétala y el herraje ya mencionado antes para los Evangelistas. Tanto la cabeza como las manos y pies están labrados con maestría. Además del cuerpo, son los ropajes, sus pliegues y los adornos de la túnica en el pecho, lo más llamativo de esta figura. El escultor utilizó sin duda el trépano para marcar los pliegues, sobre todo los de las piernas y la caída del manto al exterior de las piernas y entre los pies.
El aspecto general es de serenidad, nobleza y una cierta sacra severidad - Ιερατική- que en modo alguno compromete la enorme calidad del conjunto.
La Arquivolta: Descripción
La Portada está compuesta por cinco roscas de arco, más el arco de ingreso, todos ellos algo rebajados respecto del medio punto [2]. Comenzado desde el exterior:
La primera rosca es taqueada, labrada con toda pulcritud y precisión, como lo está la Portada en su totalidad.
La cuarta es un baquetón, menos grueso que el de la segunda rosca, rodeado por bolas.
La quinta es de hojas de acanto dobladas en el exterior del arco, muy simples y elegantes.
Para apreciar la perfección de la talla y la armonía de la composición de la Portada, recomendamos ver todas las imágenes y vídeos de esta secciónen pantalla completa.
El Arte de los Capiteles
En esta sección vamos a seguir al pie de la letra la descripción de García Guinea en [2] (algunas omisiones, mayúsculas y negritas, así como comentarios, son nuestros):
Todos[los arcos de la Arquivolta]apoyan sobre cimacio con decoración de palmetas dobladas e inscritas en su propio tallo, que vemos bastante en las iglesias del Norte palentino, Villanueva de Pisuerga, Olmos de Santa Eufemia, etc.
Los capiteles de esta Portada forman una orla casi unida de figuras, bellamente talladas, muy esquemáticas en sus vestiduras, sobre todo, y cuya interpretación se hace confusa.
Describiendo sucesivamente el grupo de la izquierda, de fuera a adentro, vemos en el primer capitel dos jóvenes o muchachos abrazados. A continuación una escena compuesta de un personaje barbudo, con turbante o cofia, que alancea un león sobre el que cabalga, desquijarándolo, una figura de larguísima cabellera.
Indudablemente, todas las representaciones de Sansón en la iconografía románica han tenido semejante ideación [...] La misma largura del cabello nos lleva a interpretar en este sentido el relieve que estudiamos. Pero ¿y esa otra figura que alancea a la fiera? La Biblia explica así el pasaje de la historia de Sansón: "Al llegar a la viña de la ciudad, como se alejase Sansón algún tanto de sus padres, saliole al encuentro un león cachorro. El espíritu del Señor vino sobre Sansón, el cual no teniendo arma alguna, despedazó al león (como se despedaza a un cabritillo)". No interviene en el episodio, para nada, un tercer personaje que ayude, como aquí claramente, a la muerte de la fiera.
[...] Estimo que parte de la decoración iconográfica románica, sobre todo en las últimas épocas y de los edificios rurales, se valía de temas que utilizaban mezclados, sin una clara constancia de su valor interpretativo. Así, transformaban lo que debía ser un motivo de enseñanza en una simple orla decorativa o, si no llegaban a ese extremo, a veces, en un afán simbólico, unían escenas de un valor similar.
Tal vez esto haya sucedido en este capitel que tratamos de interpretar. Parece indudable que uno de los símbolos más utilizados por los artistas románicos es el de la lucha contra las fuerzas del mal, pasiones, vicios o herejías. La muerte del dragón, la matanza de la fiera e, incluso, la caza naturalista del oso u otro animal carnicero es, probablemente, una clara ideación de este triunfo del bien sobre las asechanzas de las tinieblas.
Y como el tema se Sansón desquijarando al león puede también encaminarse a este mismo sentido interpretativo, no es extraño que vengan amalgamados en este capitel de Moarves dos temas muy semejantes, que, por otra parte, volvemos a ver en un capitel del Monasterio de Aguilar, posiblemente del mismo escultor que idea los de Moarves.
García Guinea [2] se plantea un problema similar con el capitel de las bailarinas:
Se trata de una danza de dos bailarinas, de largos cabellos y traje sumariamente conciso, al son de instrumentos de música tocados por personajes sedentes. ¿Qué quiere representar esta escena? Quizás tenga una base fundamental de carácter bíblico, pero tampoco parecería extraño que nos creyésemos encontrar ante un escena naturalista, una danza de las famosas danzaderas moriscas. Desde luego, por los cuerpos de las danzarinas, parece que se trata de un baile lascivo, quizás otra representación del pecado.
Tras unos comentarios sobre capiteles que el autor estudió en Toulouse y en la ermita de San Jaime de Agüero (Huesca) (hay otros muchos casos de capiteles con bailarinas, véase el excelente artículo de García Omedes aquí), el autor concluye que el capitel de Moarves, como el de San Jaime de Agüero, representa a Salomé en su danza ante Herodes, de la que resultó la decapitación de Juan El Bautista (Mateo 14, 6-11), y que las dos danzarinas son en realidad dos vistas de la misma persona en dos momentos distintos del baile.
Un elemento que en la opinión de García Guinea apoya esta interpretación es la imagen sedente de un personaje barbado, con aspecto y pose del más alto estatus social, situado a la derecha del juglar (puede verse en la parte derecha de la imagen inmediatamente bajo estas líneas). Según el autor, se trata de Herodes, que contempla la danza de Salomé.
Seguimos con García Guinea en [2]:
El otro grupo de capiteles - derecha de la Portada - representa desde la puerta hacia afuera:
Guerreros afrontados sosteniendo, con su mano izquierda el escudo y con la derecha un gran cuchillo [creemos que García Guinea se confunde aquí de manos en el caso del guerrero de la derecha del capitel, vea Ud mismo en las imágenes siguientes].
Grandes hojas verticales por encima de las cuales surgen las cabezas de dos personajes cuyas manos se apoyan sobre el anverso de las hojas. Tal vez simbolizan prisioneros o cercados dentro de murallas. [...]
Dos hombres luchando contra un león alanceándole.
Capitel exclusivamente vegetal.
Dos ancianos abrazándose y leyendo, al parecer, el mismo libro.
La interpretación de todo ello, si la tiene, se presenta absolutamente confusa y parece imposible llegar a establecer una relación entre escenas tan dispares.
Las imágenes y vídeos siguientes muestran estos capiteles. En la primera imagen, y en el video correspondiente, se incluye el capitel del arco de entrada, el de más a la izquierda, que es completamente vegetal.
Nos parece notable que en [2] no se comente el paralelismo temático entre el capitel de Sansón del otro lado con el los guerreros y el león de este.
Con esto se termina la descripción de la Iglesia de San Juan Bautista de Moarves. Como antes, recomendamos ver todas las imágenes y vídeos de esta secciónen pantalla completa.
El Entorno de la Iglesia: La Casa de los Calderones
Escudo de los Calderones con Leyenda
Escudo de los Calderones sin Leyenda
Frente a la fachada Sur de la Iglesia hay una casa con escudos de armas correspondientes al linaje de los Calderones, de cuya estirpe son personajes como Pedro Calderón de la Barca, el ilustre dramaturgo, y Abilio Calderón, que fue dos veces ministro y hombre importante en la Palencia de principios del siglo XX. La casa se puede fechar en el siglo XVII, por el escudo con leyenda que es de 1614.
Como este interesante asunto no es el que nos atañe en este blog, recomendamos al lector interesado que consulte las referencias [4] y [5]. Especialmente está última, en donde puede verse algo de la vida cotidiana de Moarves en 2015 y a José Antonio Santos en acción, enseñando la Iglesia de San Juan con su habitual amabilidad.
¡Gracias, José Antonio, por atendernos cuantas veces estuvimos en Moarves! Nunca se supo si se te quemaron los garbanzos que tenías al fuego aquel día...
[2] M.A. García Guinea, El Arte Románico en Palencia. Eds. de la Excma. Diputación Provincial de Palencia (1975), pp. 161-169. En esta obra se denomina a nuestra Iglesia "San Pedro de Moarves", una confusión relativamente frecuente en la bibliografía.
[3] l Glosario ilustrado de Arte Arquitectónico, referencia en línea, extremadamente útil para aclarar los términos especiales utilizados en las descripciones del Arte Románio.
[5] Moarves de Ojeda en La 8 Palencia TV, video de Youtube, una muy ilustrativa visión de la vida cotidiana en este pueblo de la España cada vez más vacía, y sin embargo llena de Historia, Tradición y Patrimonio. Aparece en este vídeo José Antonio Santos, el estupendo guía y curador de la Iglesia de San Juan.